Jugó, sufrió, luchó y lo consiguió. Argentina, después de 28 años, se consagró campeón. La Copa América Brasil 2021 puso fin a un largo período de sinsabores, algunos injustos, que motivaron replanteos de todo tipo. Pero el día llegó, finalmente, y la imagen de Lionel Messi, el capitán y símbolo, con la copa en la mano se hizo realidad.

Ángel Di María, como en los Juegos Olímpico de Beijing 2008, marcó el gol de la victoria en un partido de pocos espacios, donde Messi y Neymar no brillaron y Argentina tuvo a Rodrigo De Paul como gran figura.

Argentina jugó con el corazón. Con los dientes apretados transpiró y no dio por perdida ninguna pelota. Se apoyó en Emiliano Martínez desde el arco, en la bravura de Gonzalo Montiel, en la grandeza de De Paul (que además habilitó a Di María), en las gambetas de Di María y en la figura de Messi, quien aunque no jugó su mejor partido, tuvo su merecido premio. Después de tanto insistir, tarda en llegar, pero al final, hay recompensa, Lionel.

Los cambios de Lionel Scaloni en la previa se justificaron. La vuelta de Cristian "Cuti" Romero le dieron mayor solidez a la zaga central con Nicolás Otamendi y aguantó como león hasta donde pudo. 

De Paul jugó el partido de su vida. Con Di María fue el mejor. Estuvo en todas. Para jugar y para cortar. Su pase largo/asistencia para Di María resultó brillante. Otro pleno del entrenador junto con "Dibu" Martínez y Romero. 

Argentina culminó un gran torneo en donde jugó de a ratos, sufrió en otros, pero logró lo que fue a buscar. Y en Brasil, nada más, ni nada menos. Esta Copa América, vale doble.

La selección no ganaba nada desde 1993. Hace 28 años. Mucho tiempo. El primero sin Diego Maradona entre nosotros, ¿acaso fuiste vos también, Diego? ¿Tuviste algo que ver? Estamos seguros que sí.

Campeones. A festejar y que el país sea un puño apretado gritando por Argentina.