El escándalo que sacude a San Lorenzo sumó este viernes un nuevo capítulo: por orden judicial, se realizaron allanamientos simultáneos en el domicilio de Marcelo Moretti y en la sede del club, en el barrio de Boedo. La medida fue impulsada tras la difusión de un video en el que se ve al presidente –hoy de licencia– recibiendo dinero en efectivo de una mujer que le pedía incorporar a su hijo a las divisiones inferiores.

La causa está en manos del fiscal Maximiliano Vence, quien encabezó la inspección en la sede junto al Cuerpo de Investigaciones Judiciales. Se requisaron libros contables, archivos financieros, cámaras de seguridad y documentación relacionada con el jugador involucrado. En tanto, en el departamento de Moretti, ubicado en Caballito, los investigadores buscaron elementos clave como su teléfono celular.

Mientras tanto, en las inmediaciones del estadio ya aparecieron pintadas pidiendo la renuncia del dirigente, y en redes sociales, muchos socios exigen una convocatoria urgente a elecciones. A la par de la investigación interna del club, también interviene el Tribunal de Ética de la AFA.

El operativo fue ordenado por el Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas Nº4, y se suma a la presión que vive la actual dirigencia del club. Aunque Moretti se apartó temporalmente de su cargo, su salida aún no fue formalizada por la comisión directiva. En su reemplazo, asumió interinamente el vicepresidente Néstor Navarro