Lo que tenés que saber

• Mateo Carreras volvió al equipo titular tras quedar afuera en Córdoba.

• Jugó su primer partido como padre y dedicó el triunfo a su hija.

• Fue el jugador con más metros recorridos en el partido.

• Se refirió a la evolución mental del equipo y a la competencia interna.

• Los Pumas vencieron por primera vez como locales a los All Blacks.

El regreso de Mateo Carreras y un triunfo inolvidable para Los Pumas

Mateo Carreras protagonizó una jornada cargada de emociones y simbolismo personal, al volver a la titularidad luego de siete partidos y participar del histórico primer triunfo de Los Pumas sobre los All Blacks en suelo argentino. En el estadio José Amalfitani, el wing tucumano recuperó su lugar entre los 15 iniciales y celebró con un gesto íntimo: “Terminó el partido y lo primero que se me vino a la cabeza es alzarla y estar con ella”, expresó al referirse a su hija Rufina, a quien vio en la tribuna vestida con la camiseta argentina.

Emoción, motivación y familia: un partido diferente para Carreras

Carreras compartió que este encuentro fue especial por muchas razones. “Fue una motivación extra haberla visto a mi hija con la camiseta de los Pumas, fue muy emocionante. Hoy estoy acá y juego por ella. Tengo una gran familia atrás, pero ella es mi gran motivación”, aseguró luego del partido.

Titular en los primeros nueve encuentros del ciclo de Felipe Contepomi, Carreras se tomó una licencia por paternidad en noviembre del año pasado, lo que lo dejó fuera de los test matches ante Italia e Irlanda. También descansó durante la ventana de julio tras una extensa temporada con Bayonne en el Top 14 francés.

"Ya no es algo histórico, es la cuarta vez que les ganamos. Tiene que ser más común".

Mateo Carreras me representa como pocos. Un jugador que tiene que estar adentro de la cancha bajo cualquier circunstancia. https://t.co/vCogXfxB65

— Periodismo Rugby (@Perrugby) August 24, 2025

De la exclusión en Córdoba a la titularidad ante los All Blacks

El golpe más reciente llegó al quedar excluido del plantel para el primer test del Rugby Championship, en Córdoba. “No te miento, fue feo. Uno se entrena para jugar, compite con los amigos y es un sabor agridulce: estás contento por el esfuerzo que hacen los otros, pero verlo desde afuera es difícil”, dijo sobre esa experiencia.

Carreras agregó: “Fue dar vuelta la página y mi cabeza fue clara: nunca pregunto porque juego y tampoco porque no juego. Fue ajustar en todos los aspectos, sabía que había muchas cosas para mejorar, lo hice en la semana y se vio el resultado en la cancha”.

Competencia interna, rendimiento y estadísticas destacadas

La semana previa al partido mostró una intensa competencia por un lugar en el fondo de la cancha. Carreras lo relató con humor: “Competí mucho en la semana, ¡hasta en el comedor, a ver quién come más, je!”.

En el encuentro ante Nueva Zelanda, se destacó como el jugador con más metros recorridos (80), el tercero en cantidad de ataques (12), rompió tres tackles, hizo un quiebre, bajó seis rivales y trabajó en el contacto con los forwards. Mejoró su desempeño en el juego aéreo, siendo clave en duelos como el que sostuvo con Will Jordan desde el inicio del partido.

Un cambio de mentalidad en el equipo argentino

Consciente del contexto y el significado del resultado, Carreras apuntó al crecimiento del grupo. “Nos tenemos que acostumbrar a esto, este equipo está para estas cosas. Ya no es algo histórico, es la cuarta vez que les ganamos. Tiene que ser más común, tenemos que hablarlo así. Sin pecar de soberbios estamos para cosas grandes”, aseguró.

Además, remarcó la preparación inmediata para el próximo desafío: “Ahora empezamos de vuelta con la recuperación, el análisis de video y a pensar en los Wallabies”.

En los momentos más complejos del encuentro, Los Pumas mostraron organización desde el liderazgo interno. “Tuvimos errores, pero la resiliencia para recuperarse de esos errores nos sacó adelante para lograr la victoria. En los momentos complicados salió el grupo de líderes de defensa a poner paños fríos: se escuchó claro la voz de Choco (Santiago Chocobares) y Pablo (Matera) para bajar tres cambios y decir: ‘pensemos, pongamos la mente en blanco y que el partido sea nuestro’”.

Cierre de un ciclo y futuro próximo

Mateo Carreras completó los 80 minutos en cancha. En un momento, quedó tendido por un golpe, pero siguió jugando. Con 28 caps, representa a una generación que se enfrenta a las potencias con otro enfoque. “Dijimos que Vélez es nuestra casa, que queríamos ganarles acá a los All Blacks. Quedaba pendiente eso. Le ganamos tres veces allá y hoy lo pudimos hacer”, concluyó.