San Lorenzo atraviesa su mercado más austero en 30 años y apuesta todo a los juveniles


30 de julio de 2025

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Sin refuerzos y con seis salidas, el club de Boedo enfrenta una crisis institucional sin precedentes.

Una decisión histórica en medio del caos dirigencial

Por primera vez en tres décadas, San Lorenzo no sumó refuerzos en un mercado de pases, a pesar del contexto de competencia exigente y la necesidad de fortalecer un plantel que perdió nombres importantes. La decisión fue tomada por la comisión directiva encabezada por Julio Lopardo, en un contexto de crisis económica y política, con cinco inhibiciones activas, reclamos judiciales y una posible quiebra en puerta.

La última vez que ocurrió algo similar fue en el invierno de 1995, cuando el “Bambino” Veira optó por mantener la base del equipo campeón del Clausura, sin necesidad de refuerzos externos. Aquella situación fue producto de una decisión deportiva. La actual, sin embargo, responde a un colapso estructural.

De campeón a deudor: otra cara del mismo club

En aquella oportunidad, el club sostuvo la estructura con el regreso de jugadores cedidos y el ascenso de juveniles como Raúl Estévez. Hoy, tres décadas después, la historia se repite desde una lógica opuesta. La falta de recursos obliga a San Lorenzo a confiar en los juveniles de su cantera como única alternativa viable.

De momento, la única incorporación confirmada será Diego Herazo, quien regresará del préstamo en Nacional de Montevideo. El delantero colombiano, con contrato vigente hasta 2026, se sumará al plantel al finalizar su cesión, dado que el club uruguayo no hizo uso de la opción de compra.

Herazo regresa como uno de los mejores pagos del plantel

El atacante de 29 años volverá al Ciclón tras disputar 32 partidos en Nacional, donde marcó diez goles y ganó la Supercopa Uruguaya 2025. Su llegada no implicó desembolso, pero sí un contrato elevado que lo coloca entre los cinco sueldos más altos del equipo. El entrenador Damián Ayude lo tendrá en cuenta, aunque no se descarta que reciba ofertas del exterior.

Seis salidas y ningún ingreso: un balance negativo

En este mercado de invierno, San Lorenzo perdió a seis futbolistas. El más resonante fue Malcom Braida, quien se marchó a Boca por pedido de Miguel Ángel Russo. A él se sumaron Iker Muniain, que se retiró del fútbol profesional; Elián Irala, transferido al Shabab Al-Ahli por 2.8 millones de dólares; Facundo Bruera, que renovó préstamo con Barracas Central; Alexis Sabella, que rescindió por las inhibiciones, y Jaime Peralta, quien volvió al Deportivo Cúcuta.

El caso de Juan Cruz Vega también llamó la atención. Había llegado desde el ascenso en 2024, no jugó un solo minuto y se fue al fútbol peruano.

Un alivio financiero momentáneo, pero con deudas pendientes

Por estas salidas, el club recaudó aproximadamente cinco millones de dólares. Sin embargo, la dirigencia decidió no utilizar esos fondos para levantar las inhibiciones, sino destinarlo al pago de salarios del plantel y cuerpo técnico hasta diciembre. De esta forma, San Lorenzo postergó el pago de cinco sanciones activas y sólo cumplió con una, que implicó una multa de mil dólares impuesta por FIFA.

La deuda total supera los dos millones de dólares. Incluye pagos pendientes a clubes y ex jugadores, como los 600 mil dólares al Monterrey por Adam Bareiro, 800 mil a Diego Rodríguez, y 250 mil a Cristian Zapata. A eso se suma el reclamo del Austin FC por Jhohan Romaña, que podría salir si algún club paga su cláusula de cinco millones de dólares limpios.

Juveniles al poder: la apuesta de Ayude para el semestre

La situación actual forzó al técnico Damián Ayude a volcarse de lleno al semillero. Desde su llegada al primer equipo, debutaron o sumaron minutos Facundo Gulli, Agustín Ladstatter, Branco Salinardi, Manuel Insaurralde, Francisco e Ignacio Perruzzi, y Teo Rodríguez Pagano, quien ingresó ante River en el Monumental.

La política será clara: “foguear a los pibes” como única estrategia posible para competir, al menos hasta que el club consiga levantar las sanciones que lo limitan en el mercado.

Jhohan Romaña, la joya que podría irse

Desde Europa llegó un sondeo del Almería de España por Jhohan Romaña, defensor central de 26 años. Tiene contrato hasta 2026 y su salida sólo se dará si se paga la cláusula. “Si en algún momento llegara una oferta que le sirva al club por su situación, bienvenido sea”, declaró el colombiano luego del empate ante River.

Lopardo fue tajante: no habrá más ventas salvo que se abone la cláusula de rescisión. La estabilidad del equipo dependerá, entonces, de resistir propuestas externas durante lo que resta del mercado europeo.

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